En esta ocasión retomamos el retoque fotografico para superar un problema que aparece con cierta frecuencia, generalmente por culpa de una exposición excesiva.
Hay que recordar que para realzar el cielo viene muy bien usar un filtro polarizador. Lo giramos hasta que percibamos una disminución de la luminosidad del cielo y ya podemos hacer la foto, pero supongamos que no lo hicimos, elegimos una exposición excesiva y obtuvimos una de esas fotos sosas con cielo blanco.
Para hacer este retoque hemos ajustado la curva de color en la forma que veis en la figura.
Con eso obtendremos partes azules, aunque si la foto esta muy quemada permanecerán zonas blancas imposibles de recuperar por este método.
También pueden aparecer algunos artefactos e irregularidades, así que usaremos la herramienta del aerógrafo con una máscara de pincel grande y de bordes difusos para intercalar algo más de azul donde interese.
Luego habrá que difuminar el cielo para disimular las irregularidades de color en el cielo y que estas sugieran algo de nubosidad si es que nos apetece.
Para no desentonar las pinceladas que realicemos con el aerógrafo, se usarán los colores claros u oscuros obtenidos de distintas zonas del cielo. Basta para ello succionar el color con la pipeta (cuentagotas).
La mayoría de estas técnicas ya las hemos comentado y este tutorial sería un caso práctico bastante trivial para el uso de estas herramientas, pero si no os apetece consultar esos artículos previos podéis preguntar libremente cualquier duda que os surja.
En este ejemplo hemos hecho un retoque bastante radical. En la práctica suelen dar mejores resultados los retoques más sutiles. (Hemos cambiado bastante la foto). En cualquier caso todo va en gustos.
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