La foto fue tomada en primavera del año pasado en el Tajo a su paso por Aranjuez. Los gansos y otras aves acuáticas encuentran alimento en esta suave pendiente artificial alfombradas de musgos, algas y plantas acuáticas. Picotean en busca de todas clase de animalillos como larvas de insectos, etc, que son un manjar para ellos.
Este sin duda el aspecto de un ecosistema sano, y aunque sea un ecosistema totalmente artificial, existe una valiosa biodiversidad. El agua gracias a estas plantas se oxigena, y se limpia de nitratos y fosfatos.
En esta parte del río hay gran variedad de peces. Al ser un sitio muy turístico con parques y jardines, no resulta fácil el mantenimiento de la fauna y flora autóctonas pero es un ambiente muy agradable.
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